En una noche caraqueña, en un salòn del Instituto de Ciencias Experimentales que hacia de Biblioteca para los miembros de esa corporación, se fundò nuestra Sociedad Venezolana de Historia de la Medicina, el viernes 28 de Julio de 1944. Era una casona tìpica de entonces, situada entre las esquinas de Jesuitas y Tienda Honda, a seis cuadras apenas de la sede actual en el Palacio de las Academias Nacionales. Concurrieron a la històrica cita tan solo una docena de personas, vinculadas a las ciencias de la salud. Uno de ellos era el Dr. Jesùs Rafael Risquez, Director del citado instituto, ilustre integrante de la saga iniciada por el Maestro Francisco Antonio Risquez, de quien fue hijo. Le acompañaban Santos Dominici, Diego Carbonell, Vicente Dávila, Joaquín Díaz González, Juan Iturbe, Víctor Ovalles, Ambrosio Perera, José Rojas Contreras, Jesús Romero Sierra, Santiago Rodríguez y Jesús Sanabria Bruzual.
De ese grupo de notables, 7 fueron académicos, los Drs. Carbonell, Dominici, Iturbe, Romero, Sanabria Davila y Perera (estos dos ùltimos pertenecieron a la Academia de la Historia) Cinco eran catedráticos universitarios, el mismo Dominici en Clínica Médica y los Drs. Díaz González en Historia de la Medicina, Risquez en Bacteriologìa, Rojas Contreras en Cirugía y Ovalles en la Facultad de Farmacia. Interesante por demás la documentación aportada por el Dr. Foción Febres Cordero, odontólogo y ExPresidente de la SVHM. en su libro Apuntes para la historia de la Sociedad de Historia de la Medicina (1989) Hemos constatado allí, la clara y firme visión de aquellos hombres, reflejada en el estatuto fundacional.
A un año de constituirse la institución sufre su primera baja, con la prematura muerte del Dr. Diego Carbonell y aunque el receso fue largo, logró reconstituirse en 1953, con la valiosa incorporación de los Drs. Ceferino Alegría, Ricardo Archila, Franz Conde Jahn, Salvador Córdoba, Marcel Granier, Alejandro Príncipe, Raúl Soulés Baldó (Ministro de Sanidad para ese momento) Miguel Zúñiga Cisneros y el escritor Mario Briceño Iragorry, La institución ha hecho historia y en sus anales existen figuras y aportes notables, que deben inspirar e impulsar el compromiso de honor de sucesivas generaciones. Esta Revista fue uno de los compromisos más valiosos y útiles que ellos nos legaron, a los fines de cumplir determinantes objetivos de investigación y de trascendencia.
Con el presente número continuamos la prolífica e inagotable siembra y nos asociamos a las celebraciones del Septuagèsimo Aniversario de la SVHM. Hemos incluído trabajos por demás interesantes sobre los médicos Vicente Salias, Ricardo Baquero González, Rafael Viso Pittaluga y Francisco Montbrùn; un análisis sobre las primeras publicaciones pediátricas y otro sobre Tuberculosis en las Bellas Artes, así como un homenaje a la Dra. Ruth Lerner de Almea, Miembro Honorario de la institución, con motivo de su fallecimiento. Esperamos captar la atención de nuestros valiosos lectores.