Caracas, 7 de diciembre de 1953.
Señor Presidente y demás Miembros de la “Sociedad Venezolana de Historia de la Medicina”
Muy distinguidos señores:
Sirva la presente carta para llevar a conocimiento de ustedes mi profundo reconocimiento, así como el de mis hijos y demás familiares de mi finado esposo, el doctor Plácido Daniel Rodríguez Rivero, por la hermosa iniciativa que tuvieron de publicar la obra de aquel intitulada “EPONIMIAS ANATOMICAS”, a cuya preparación dedicó los esfuerzos de sus últimos años y dejó lista para la imprenta poco antes de su fallecmiento.
El noble gesto de esa Sociedad deja emèñada nuestro gratitud, pues él revive el recuerdo y las preocupaciones científicas de nuestro deudo, y permite que sea aprovechado el fruto de un estudio hecho con perseverante amor y desinteres, por las nuevas promociones mdicas y por los estudiosos de la Medicina.
Al mismo tiempo me es grato ofrecer a usted, atendiendo en esta misma oportunidad a los deseos manifestados por su digno Secretario, el doctor Ricardo Archila, un retrato del inolvidable compañero de mi vida, con destino al Salón de Sesiones de esa Sociedad, a la cual una vez más expresamos nuestro agradecimiento por esta nueva manifestación de aprecio para con su memoria.
Sírvase aceptar, señor Presidente, el testimonio de nuestra admiración y simpatía por la relevante obra que usted y sus compañeros vienen realizando para honor de la Ciencia Médica Venezolana.
Atentamente,