Trabajo aparecido en Rev Venez Cirugía, Año 2010; Vol. 63 (2). Se publica con el correspondiente permiso, por la importancia del tema para la historia de la Medicina nacional y por tratarse de una conferencia dictada por los autores en esta institución"

Correo roger.escalona@gmail.com

Presentado Diciembre 2, 2009. Entregado Abril 17, 2011. Aprobado Junio 24, 2011

RESUMEN

Basada en testimonios y documentos familiares, así como en fuentes bibliográficas de la época, la autora revela la interesante biografía de un médico trujillano, el doctor José Benigno Hernández (1884–1937).Destacó en el ejercicio de su profesión, como también en otro servicio a la patria, como médico de la comisión que determinó los límites entre Venezuela y Brasil, en 1930. Dicha comisión aportó además información sobre condiciones de salud de aborígenes guayaneses. La autora hace énfasis en las virtudes de José Benigno, mostrando grandes coincidencias con el carácter de su ilustre hermano, el Dr. José Gregorio Hernández.

Palabras Clave José Benigno Hernández. José Gregorio Hernández. Médicos trujillanos

ABSTRACT

Based on testimonies and family documents, as well as bibliographical sources of the time, the author reveals the interesting biography of Trujillo’s physician, Dr. Jose Benigno Hernandez (1884-1937), brother of Dr. Jose Gregorio Hernandez. Highlighted in the exercise of their profession, as well as other service to the country, as phisician of the commission that determined the boundary between Venezuela and Brazil in 1930. The commission also provided information on health conditions of aborigines of Guayana. The author emphasizes the virtues of José Benigno, showing great overlap with the character of his illustrious brother.

Key Words: José Benigno Hernández. José Gregorio Hernández. Trujillanos phisicians.

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El objetivo de este trabajo es dar a conocer a un médico, gran profesional, polifacético, humilde y con una bondad infinita. Lo conocí a través de su ahijada, quien es mi abuela Gladys Obadía que lo conoció en vida y ha dado a conocer a sus hijos, descendencia y amistades, la dedicación, nobleza y humildad como persona y médico, logrando así una gran devoción por el Dr. José Benigno Hernández, a través de todos estos años, quienes han manifestado que se les concede todo favor que han pedido, lo cual se demostrará mediante testimonios. Traté de contactar a su única hija quien también me da testimonio que no les dejó bienes en fortuna porque nunca se lucró con su profesión, muriendo pobre y ejerciendo la medicina sin costo alguno a todos los que a él acudían.

Su padre fue Don Benigno Hernández quien en sus primeras nupcias con Doña Josefa Antonia Cisneros tienen 7 hijos:

1) María Isolina, nació el 24 de mayo de 1863 y murió el 4 de diciembre del mismo año. 2) José Gregorio, nació el 26 de octubre de 1864 y murió el 29 de junio de 1919. 3) María Isolina del Carmen, nació el 25 de mayo de 1866, se casó con Juan Carvallo, enviudó a los pocos meses, no tuvo hijos y murió el 22 de agosto de 1922. 4) María Sofía, nació el 29 de septiembre de 1867, se casó con Temístocles Carvallo, de quien tuvo varios hijos y murió el 11 de mayo de 1898. 5) César Benigno, nació el 30 de agosto de 1869, se casó con Dolores de Jesús Briceño González el 19 de febrero de 1892, procreando a 6 hijos: Benigno María, María Luisa, Benjamín del Carmen, Alfredo, Ernesto y Ángela, muere el 30 de septiembre de 1943. 6) José Benjamín Benigno, nació el 6 de septiembre de 1870 y murió soltero el 29 de agosto de 1894. 7) Josefa Antonia, nació el 24 de agosto de 1872 y murió soltera el 13 de enero de 1907.

En agosto de 1872 muere Josefa Antonia quedando Don Benigno Hernández viudo. En la iglesia parroquial de San Alejo en Boconó, estado Trujillo el 16 de noviembre de 1876, Don Benigno María Hernández contrajo segundas nupcias con María Hercilia Escalona. De este matrimonio tuvo 6 hijos:

1) María Avelina, nació en Isnotú el 26 de noviembre de 1877 y murió soltera en Caracas el 2 de julio de 1925. 2) Pedro Luis, nació en Isnotú el 23 de diciembre de 1878 y murió en Caracas, soltero el 17 de marzo de 1918. 3) Angela Meri, nació en Isnotú el 1 de marzo de 1880 y murió soltera en Caracas el 7 de febrero de 1904. 4) Sira María, nació en Isnotú el 27 de febrero de 1882. A los 15 años tomó velo religioso como monja dominicana enclaustrada, en Puerto España. Ocupó por varios años el cargo de Superiora. 5) José Benigno (Fig. 1) nació en Isnotú el 26 de septiembre 1884 y muere el 24 de diciembre de 1937. 6) Hercilia del Carmen, nació en Isnotú el 6 de febrero de 1887, se casó con Francisco Sálvano Briceño procreando 3 hijos: José Luis, Gustavo y Sálvano, quien muere el 6 de abril de 1925.

A instancia de su hermano José Gregorio, fue enviado a Caracas, igual que los primos Temístocles e Inocente Carvallo, una vez terminada la instrucción elemental para cursar instrucción secundaria, graduándose de Bachiller en la Universidad Central el 4 de julio de 1902. Escoge la carrera de Medicina, la cual cursa en la Universidad Central. Durante su carrera la Junta de Hospitales -en vista de que el número de candidatos para internos no correspondía al de plazas por llenar- abrió Concurso de Internado para el Hospital Vargas, en octubre de 1906. Realiza prueba escrita sobre Región ileo-cecal y Apendicitis. En la prueba oral el tema era Cápsula de Glisson y Cirrosis Hepática. La prueba práctica se realizaba mediante examen de un enfermo. El máximo de puntos era de 60 y un mínimo de 30.

Los elegidos fueron los bachilleres Temístocles Carvallo con 52 puntos, Eudoro González con 50 puntos, José Benigno Hernández con 49 puntos,. José M. Espino con 45 puntos, Tomás Landaeta con 44 puntos, Inocente Carvallo con 40 puntos y J.B. Puyou con 37 puntos (Fig. 2) Durante su internado el Boletín de Hospitales reportaba las cirugías realizadas por los bachilleres internos. Entre las realizadas por el Dr. José Benigno Hernández tenemos: Boletín Año VI, Mes IX, Septiembre 1907, 3 Extirpación de quiste de cuello; Boletín Año VII, Mes III, Marzo 1908, 3 Hepatotomía por absceso, Cura radical de hidrocele y 2 partos normales y Boletín Año VII, Mes V, Mayo 1908, 5 2 partos normales..

Su tesis doctoral se tituló “Contribución al Estudio de la Prostatitis Gonocóccica” (Tip. América, Caracas 1909) tema sugerido por el Dr. Juan Iturbe, estuvo distinguida con el N° 86. Recibió el Diploma de Doctor en Ciencias Médicas de manos del Rector Elías Toro el 22 de Diciembre de 1909. Tuvo predilección por la Medicina Interna y sus diagnósticos eran certeros, en su casa situada de Tienda Honda a Puente de la Trinidad atendía numerosa clientela que afianzaba su humanitarismo y bondad. No cobraba honorarios, siendo su único sueldo el que recibía del Hospital Vargas. La moderación, caballerosidad, modestia, humildad y amor para todos sus pacientes y familiares lo distinguió siempre, conquistando la voluntad de los que lo trataban. No le gustaba magnificar sus acciones.

En la ciencia, del siglo veinte un importante grupo de médicos nativos de Trujillo tienen renombre: los Doctores Juan de Dios Villegas Ruiz, Félix Rafael Páez, Jesús Peña Sánchez, Inocente Carvallo, José Benigno Hernández, José Rangel, Pílade Marcciani, Jorge Monagas y Ricardo Palma Labastida. El Dr. José Gregorio, sentía por él hondo afecto, y cuando decidió recluirse en la Cartuja, dispuso que su biblioteca se distribuyera entre sus sobrinos Carvallo y su hermano José Benigno, de acuerdo a sus inclinaciones.

José Benigno Hernández quedó encargado de la manutención y cuidado de sus hermanos mayores y menores, por los cuales trabajaba por amor, aun siendo uno de los hermanos más pequeños. Nobleza de José Benigno nunca resaltada, ni reconocida en la historia. El día de la muerte de su hermano José Gregorio, José Benigno acude a verlo en el Hospital Vargas, donde se hace el reconocimiento de su muerte: “El Domingo 29 de junio de 1919, día de los grandes Apóstoles San Pedro y San Pablo, entre las 2 y las 3 de la tarde, en una cama sencilla, en uno de los primeros cuartos del Hospital Vargas de Caracas, entrando por la puerta principal y doblando a la izquierda; yacía exánime el Dr. José Gregorio Hernández Cisneros……… Llegaron Temístocles Carvallo, padre e hijo; José Benigno Hernández, Inocente Carvallo y Benjamín Hernández. El Capellán del Hospital Vargas, Presbítero Dr. Tomás García Pompa, le había impuesto los santos Óleos inmediatamente cuando ingresó al Hospital, en estado de coma y con las Hermanas de San José de Tárbes procedieron a amortajarlo….” (1)

Posteriormente el velorio es efectuado en la casa de José Benigno Hernández: “Hecho el reconocimiento de ley, el cadáver del Doctor fue conducido a la casa habitación de su hermano el Doctor José Benigno Hernández, situada de Tienda Honda a Puente la Trinidad” (2)

Luego del velorio, en El Nuevo Diario, colocan el anuncio de la muerte, el lunes 30 de Junio: “Sus hermanos y sobrinos que suscriben, suplican a sus amistades se sirvan de acompañarlos a los actos de traslación desde Tienda Honda a Puente la Trinidad, al Paraninfo de la Universidad Central y de enterramiento del cadáver, que se verificarán hoy, a las 10 am y 4 pm respectivamente. César Hernández, José Benigno Hernández, Temístocles Carvallo (padre e hijo), Inocente Carvallo, Benigno Hernández, Benjamín Hernández, René Carvallo, Alfredo Hernández y Ernesto Hernández.” (2)

José Benigno Hernández junto con su hermano César, el primero de agosto de 1919 realizan un escrito en relación con el juicio contra el “chauffeur” señor Fernando Bustamante para exonerarlo de toda culpa. El escrito cita lo siguiente: “Ciudadano Juez de Primera Instancia en lo Criminal del Distrito Federal: Presente: Los suscritos, Doctor José Benigno Hernández y César Hernández, vecinos de Caracas, en nuestro nombre y en el de toda la familia del malogrado Doctor José Gregorio Hernández, venimos a expresar a usted en la presente exposición lo mismo que verbalmente comunicó a usted mi persona Doctor José Benigno Hernández acerca del proceso que se sigue en el Tribunal que usted dignamente regenta a Fernando Bustamante, conductor del automóvil que desgraciadamente produjo la muerte de nuestro inolvidable hermano. Queremos hacer constar que la familia Hernández no ha pedido ni pide que se castigue a Bustamante, y así ninguno de nosotros se ha constituido acusador en el proceso, porque estamos convencidos de que el infausto y nunca bien lamentado suceso en que pereció el Doctor José Gregorio Hernández fue debido a un accidente imprevisto, sin intención delictuosa alguna del expresado Bustamante, ni culpa suya. Dios, en sus altos designios, dispuso, sin duda que el Doctor Hernández falleciera del trágico e inesperado modo en que sucedió su muerte, y nosotros nos conformamos con su soberana voluntad. Creemos cumplir un deber de conciencia haciendo a usted esta manifestación y tenemos la convicción de que el Doctor José Gregorio Hernández, desde la morada de los justos en que esperamos se encuentre su alma, aprobará nuestra conducta.” (3)

No sólo tuvo interés en la Medicina. También se interesó vivamente por las bellas letras y en compañía del Dr. Lares Ruíz fundó una revista titulada “Ciencia y Hogar” que él redactó; se conoce su existencia hasta el número 16 del primero de septiembre de 1919 en que publicó “La Vida en Playas del Caribe”. Lo atraía la aventura cuando el Dr. José Benigno junto con Domingo Ottati y el periodista Don Rafael Silva “Lino Sutil” realizaron el primer viaje en automóvil de Caracas a Macuto el 1 de abril de 1914 a través del viejo camino semi acondicionado.

En Noviembre de 1919 fue nombrado Médico de la Comisión Venezolana de Límites con el Brasil (Fig. 3 y 4) partiendo en Octubre de 1929 hasta Marzo de 1930, desde Caracas hasta Puerto España, Trinidad, el Orinoco, Ciudad Bolívar, el Canal de Casiquiare, por las aguas de Amazonas hasta Río Negro, en una expedición con la Sociedad de National Geographic teniendo como propósito del viaje el estudio de enfermedades infecciosas tropicales. Estuvo en plena selva, en medio de indios salvajes, a pie, en lancha, entre la espesura, atravesando ríos y grandes caños, durmiendo a la intemperie en chinchorros colgados de grandes árboles.

En 1930 a poco de haber regresado a Caracas se sintió afectado por una fuerte opresión y constantes asfixias. Entre los médicos tratantes estuvieron los eminentes Heberto Cuenca y Miguel Pérez Carreño. Le encontraron un corazón tan hipertrofiado que trabajosamente le cabía en el tórax. Supusieron Enfermedad de Chagas en que la localización miocárdica del Tripanosoma desencadenó severa miocarditis. En junio de 1931 contrajo nupcias con Anita Espinal Sandoval y de ésta unión nació una hija llamada Josefina, quien se fue de 14 años en 1946 a USA. Se casó con el veterinario norteamericano Robert Bluntzer y vive actualmente en Corpus Christi, Texas.

Después del matrimonio y ya bastante minada su salud, se residenció por prescripción médica en Maiquetía, donde continuó ejerciendo la profesión y practicando la caridad a manos llenas; a pesar de las limitaciones a que lo sometía el mal. En Noviembre de 1937, sintiéndose mejor volvió a Caracas, pero tuvo que regresar a Maiquetía por recrudecimiento de los síntomas, falleciendo en dicha ciudad el 24 de Diciembre del mismo año de 1937.

José Gregorio Hernández y José Benigno Hernández fueron enterrados juntos en el cementerio del Sur. Luego el Dr. José Gregorio fue mudado a la Candelaria. Muchos seguidores de este se mantuvieron depositando ofrendas y agradecimientos en la tumba de José Benigno Hernández creyendo que el Dr. José Gregorio seguía allí. A lo largo de los años la familia Obadía Masrroua les ha explicado a los visitantes de la tumba esta situación a lo que ellos responden “Sigo viniendo a esta tumba, porque lo que yo pido se me concede”.

Josefina Hernández de Bluntzer (Fig. 5) tiene un grado en Artes Finas, de la Universidad A&M, en Corpus Christi, Texas, USA. Es pintora de exposiciones de muchos centros de arte y galerías, trabaja en el Museo de Artes, al sur de Texas y pertenece al C.C. Texas y al Museo de Ciencias e Historia en Corpus Christi, Texas.

Testimonios de Josefina Hernández Espinal, hija del Dr. José Benigno Hernández

1. “Tenía un amigo dueño de una cigarrera, en 1934 este le pidió como favor que fuera a examinar a sus trabajadores. En esa época los trabajadores recibían cigarros de regalo o por muy poco precio, y todos fumaban muchísimo. Con la evaluación constante y la radiografía del tórax que les hizo a los trabajadores mostraban pulmones congestionados y en malísimas condiciones. Pensó que eso tenía que ser a causa del cigarro y lo mucho que fumaban. Habló de inmediato con su amigo de sus sospechas entre la conexión del tabaquismo con el daño pulmonar, siendo necesario no darles cigarros a los trabajadores, y explicarles las consecuencias y el por que deberían dejar de fumar. En esa época nadie sospechaba la conexión del cigarro y el cáncer, pero él desde ese entonces les preguntaba a todos sus pacientes si fumaban y les explicaba porque tenían que parar, y que “ si no paraban no los trataría más”
2. “Cuando mi papá fue como Médico de la Comisión de Límites con Brasil, cerca del nacimiento del Río Orinoco hasta el Río Negro, en la selva, pasaron por Ciudad Bolívar y de allí le mandó a mi mamá que en esa época estaban comprometidos que decía que estaba encantado y antes de salir en ese viaje esta medallita (enseñándola en el video con sus manos) se la dió el a mi mamá y le dijo que le dejaba a San José para que la cuidara mientras el estaba en la selva, pasaron creo yo de 5 a 6 meses en la selva mas o menos”
3. “Cuando yo estaba chiquita, mi papá y mi mamá se mudaron a Maiquetía, porque él tenía el corazón grande, era una enfermedad que no sé en realidad como se llama, pero parece que le ocupaba casi todo el pecho y le daban unas anginas terribles. Entonces como Caracas tenía tanta altura lo mandaron a vivir al nivel del mar y nos fuimos a Maiquetía. Allí hizo el bien en cantidad porque la gente pobre que vivía en los pueblitos en ese época, Naiguatá y todas esas áreas pobrísimas, venían para que él los examinara y los tratara. Les regalaba los remedios y nunca les cobraba nada. Por ejemplo uno de ellos le trajo un lorito, que lo tuve yo hasta ya grande, como pago por el bien que les había hecho”
4. “Otra anécdota de su bondad y su habilidad como médico fue que parece que cuando yo nací era 7 mesina tenía un problema enorme en el Hospital Clínica Razetti porque no tenían incubadoras y mi mamá no tenía leche, entonces ¿con que me daban de comer?, parece que una señora que estaba allí que acababa de tener un bebé oyó a las enfermeras hablando del problema y preguntó que quien era y que pasaba, cuando le dijeron que era la niña del Dr. José Benigno Hernández, ah no dígale al doctor que yo me quedo en la clínica el tiempo que sea porque yo tengo leche como para 4 niños y la niñita se la cuido y se la alimento, entonces pude yo quizás sobrevivir por eso porque ella dijo que mi padre había salvado la vida de su papá”

Josefina Hernández Espinal y el Dr. Robert Bluntzer tienen 3 hijos: Mary Ellen Bluntzer, nació en 1953, graduada de medicina en la Escuela de Medicina de Southwestern, en Dallas, Texas y anteriormente graduada de Enfermera en la Universidad Incarnate Word, en San Antonio, Texas. Ejerce y vive en Dallas, como Médico Internista, está casada con el Dr. Jon Blachley, que trabaja en Medicina Crítica. El Segundo hijo es Christopher Joseph Bluntzer, nació en 1958, se graduó en Economia & Lenguaje Español, en la Universidad Rice, en Houston. Está casado con Elena Colon de Bluntzer, viven y tienen una compañía de bienes raíces llamada "Bluntzer Group" en Miami, Florida. La hija menor Dianna Bluntzer Dura, nació en 1963, se graduó en Historia del Arte, en la Universidad de Austin en Texas, también estudió con la compañía Internacional Sotheby's en Londres, Inglaterra y trabajó en la casa de subasta de Sotheby's Nueva York, en el departamento de arte de Latino América. Vive en Bedford Nueva York. Tiene 3 nietas: La mayor Annabelle Dura de 14 años, Madeleine Dura de 8 años y la nieta menor Adelaide Dura de 5 años.

Su ahijada y mi abuela, Gladys Obadía, nació el 24 de marzo de 1919, actualmente de 90 años de edad (Fig. 6) Ella nos dijo “Yo soy Gladys Obadía de Masroua, ahijada del Dr. José Benigno Hernández. El era una persona muy humilde, iba a las casas y no cobraba ni un centavo, porque era muy bueno, muy caritativo. Viajaba en coche, porque en ese entonces se usaba el coche… El iba a la casa a vernos y nos mandaba a sacar la lengua y decía: “¡Ay1 No hay que volverla a purgar. El me hizo un gran milagro y por eso es que estoy aquí sentada”

El Dr. José Benigno Hernández tiene muchos seguidores, en vista de que concede lo que se le pide. Entre ellos tenemos las siguientes familias: Obadía, Masroua, Gil, Benmergui, Barraez, Machado, Salazar, Simone, Pacillo, Aguilar, Rosales, Drexler, Uzcátegui, Holzhauser, La Cruz, Perfetti, Omaña, Lozada, Malpica, Alfano, Izquierdo, Cassanave, Bujanda, Alby, Castejón, Petterson, Zabaleta, Montes, Gonzalez, Ríos, García, Farías y Guía. Entre los testimonios de milagros realizados por el Dr. José Benigno Hernández tenemos:

1. Dra. Rosalba Malpica: “Mi hijo Pier Malpica tuvo un accidente automovilístico en Cuyagua y fue trasladado desde el Hospital de Maracay a Caracas, le diagnosticaron que tenía una fractura de pelvis con desplazamiento de columna posterior de Acetábulo derecho y una fractura lujaci{on Tarso-metatarsiana Lisfranc‟s del pie derecho y el desprendimiento de la oreja izquierda. La opinión de los médicos era que él no iba a volver a caminar. En esos momentos de tensión y preocupación como siempre lo hacemos, acudimos a través de las oraciones a pedirle al Dr. José Benigno Hernández para que guiara a los médicos y nos concediera el milagro de que volviera a caminar. Todo fue un éxito y mi hijo está caminando desde año y medio, después de haber hecho sus fisioterapias. Todo esto es por fe y la oración al Dr. José Benigno Hernández”
2. Nancy Lozada Conforte: “ Vengo a dar el testimonio sobre mi hija la cuál fue diagnosticada por los médicos de un Melanoma sobre el esternón, ella fue operada y la muestra que se envió al anatomopatológico arrojó después de haber esperado el resultado, arrojó que no tenía absolutamente el tumor que se creía que era, todo esto es debido a las oraciones y a la fe que le tenemos al Dr. José Benigno Hernández, ya que en el momento de su operación, toda la familia, todas las amistades, le pedimos, le solicitamos al Dr. José Benigno Hernández que estuviera en el quirófano y que mi hija no tuviera ese tumor tan maligno, eso fue en 1996, mi hija hoy tiene 38 años, tiene dos hijas y está perfectamente bien de salud”
3. Angélica Pacillo: “ Soy la madre de Guadalupe, vengo a dar testimonio de un acontecimiento que pasó en nuestra familia cuando Guadalupe tenía 7 años, ella se detectó un bulto en el fémur izquierdo, fuimos rápidamente para la clínica y tenía un sarcoma maligno, que era un tumor de cartílago y hueso, todos nosotros rezamos y tuvimos mucha fe en el Dr. José Benigno Hernández para que intercediera en la operación y se lograra el milagro que después de 20 días de dar el resultado, a sabiendas de que un 98 % era maligno, pues salió totalmente benigno, le damos gracias al Dr. José Benigno por tal milagro “